Anuncian la creación de un proyecto de Archivo Extranjería, Memoria y DDHH

A 50 años del Golpe, y como parte de las acciones gubernamentales en memoria, DDHH y reparación, el Servicio Nacional de Migraciones anunció que está trabajando en la creación de un Archivo Extranjería, Memoria y DDHH de los documentos del DEM entre 1973-1990. 

En 1990, con el retorno a la democracia, en las oficinas de Departamento de Extranjería y Migración (DEM), antecesor de SERMIG, se encontraron cajas fuertes con la documentación oficial de los decretos de expulsiones de miles de chilenos y extranjeros, junto a informes de inteligencia de ciudadanas y ciudadanos extranjeros elaborados por la Central Nacional de Información (CNI).

El Director Nacional, Luis Eduardo Thayer, explicó que esta iniciativa “es parte del compromiso activo con la memoria. Creemos que es importante relevar y resguardar la documentación relativa a la represión y expulsiones de miles de chilenos y chilenas. Queremos que sea un aporte a la reparación y construcción de futuro”.

En cuanto al respeto a  los DDHH de las y los extranjeros, el Director destacó el avance que significa la nueva Ley de Migraciones que establece en su artículo 3: “El Estado deberá proteger y respetar los derechos humanos de las personas extranjeras que se encuentren en Chile, sin importar su condición migratoria”.

Este proyecto cuenta con apoyo del Archivo Nacional de la Administración (ARNAD), el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos (MMDH), la Universidad de Chile y el Instituto Milenio de Fundamento de Datos (IMFD), y se trabajará en distintas etapas; la primera, durante el 2023, será realizar un catastro de los documentos del DEM del período que actualmente se encuentran en la ARNAD y el MMDH. 

El 11 de septiembre de 1973 el Golpe de Estado cívico militar interrumpió de forma violenta la convivencia democrática de la sociedad chilena, marcando la historia del país y remeciendo al mundo entero. A 50 años de ese trágico momento, confirmamos nuestro compromiso con los Derechos Humanos, convencidos que la democracia se construye con memoria y futuro.

La persecución política incluyó la expulsión de miles de chilenos y chilenas que fueron obligados a dejar el país y  salir al exilio. El Ministerio del Interior de la dictadura, además, dictó la expulsión de cientos de extranjeros y migrantes adherentes del gobierno de Salvador Allende. 

La represión le costó la vida a 29 personas extranjeras provenientes de Argentina, Bolivia, Ecuador, España, Uruguay, y otros países, que fueron asesinadas y 13 de ellos continúan como detenidos desaparecidos.